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dissabte, 27 de març del 2010

“Turismo a contracorriente”

He iniciat una col·laboració amb la Federació Estatal d’Hoteleria i Turisme de CCOO (FECOHT-CCOO) que he titulat “Turismo a contracorriente”. De tant en tant, intentaré aportar alguna cosa al necessari debat sobre el turisme espanyol.. Aquí va el primer article.

Turismo y dialogo social

Es sabido que el día 1 de marzo el Gobierno presentó el documento titulado “Acuerdo político para la recuperación del crecimiento económico y la creación de empleo”. Con esta propuesta se iniciaba el proceso de conversaciones entre los grupos políticos en el Palacio de Zurbano de Madrid. Dicho documento consta de una Introducción, un capítulo dedicado a medidas prioritarias para la creación de empleo y la reactivación de crédito y acaba proponiendo “Cuatro ejes de actuación.”

El primero de esos ejes es el dedicado a las medidas para mejorar la competitividad de la economía española y fomentar la creación de empleo, entre las que se encuentran las dedicadas al turismo. Cuatro son las medidas que se plantean: 1.- Ampliación del programa Turismo Senior Europa, 2.- Plan de incentivos a la desestacionalización, 3.- Colaboración del sector privado en la promoción exterior del turismo y 4.- Ampliación hasta 500 millones de euros de la línea ICO-FuturE para apoyar la renovación del sector. Las cuatro iniciativas gubernamentales son, en mi opinión, acertadas y necesarias aunque insuficientes. La mayor parte de la industria turística española necesita pasar por un auténtico proceso de reconversión y no únicamente de modernización de la planta hotelera y de la mal llamada oferta complementaria. Tal proceso será costosísimo y muy largo en el tiempo y, por eso, es fundamental un Pacto de Estado sobre la materia. Si no es así, es una quimera pensar en la posibilidad de reconvertir los destinos turísticos españoles.

Pero más allá de esta importante ausencia en el documento del Gobierno, cuya insuficiencia se ha agravado en el documento de síntesis de 25.03.10, lo que me ha sorprendido más es que, mientras en el apartado dedicado al “Plan Integral de Política Industrial 2020” se hace una referencia explícita a la participación de los Agentes Sociales (a través de la Mesa del Diálogo Social reforzado), en el caso de turismo ni se menciona tal participación. Quizás se piense que es suficiente la consulta en el ámbito del Consejo Español de Turismo, pero ya se sabe que una cosa es ser consultado y otra interlocutor necesario. Creo que no podemos estar más tiempo sin reivindicar con mucha fuerza que la política turística española se incluya en el catálogo del Diálogo Social reforzado.

Es mucho el empleo que está en cuestión en el sector del turismo. No es un asunto marginal. Seguramente para salir de la crisis las empresas y los destinos tendrán que hacer cosas nuevas y una vez superada esa recesión no sabemos cómo actuará el consumidor de turismo. Dicho en otras palabras, la crisis ha provocado cambios en el comportamiento de los consumidores y consumidoras, tales como reducción del gasto en el destino turístico, aumento de las estancias en todo incluido, crecimiento de las reservas de última hora y del turismo de proximidad, etc.; cambios que las empresas los han gestionado con ajustes en empleo para mantener beneficios
Ahora mismo la gran pregunta es, si después de la crisis el comportamiento del mercado turístico volverá a las pautas previas a la situación crítica o si, por el contrario, se mantendrán durante largo tiempo estas pautas de insostenibilidad económica y social. El gran reto depende de las políticas públicas que implementen las administraciones públicas, por eso debería ser materia de Diálogo Social Reforzado.

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